La dulce vida
[Los cuatro jinetes del Apocalipsis, Alberto Durero, 1498]
Durante el año 1507
alguien llamado Alberto Durero me pintó.
La obra se llama Retrato de Muchacha (o Muchacho)
y es un pergamino aplicado sobre tela.
Él también pintó a Los Cuatro Jinetes del Apocalipsis.
Hace poco los cuatro jinetes y yo nos hicimos amigos.
Después de cinco siglos exactos.
Me pasa que me enamoro de uno de los jinetes
pero el jinete ya tiene novia.
Pero yo estoy tan arrinconada
tan arrinconada tan arrinconada.
Y tomo el auricular y le digo a Alberto Durero:
Voy a picarme el muslo
con la misma cuchilla que afilabas tus carbones.
Con la sangre de mi muslo
Alberto Durero pinta una obra
llamada El Jinete y La Muchacha
donde aparecemos el jinete y yo.
Conversando seriamente sobre la dulce vida
el jinete engulle frutas y a mí se me salen los leucocitos.
Alberto Durero piensa:
esta muchacha parece tonta,
ni a mí se me ocurriría llorar
frente a uno de los jinetes del Apocalipsis.
Definitivamente no se me ocurriría.
Y tomo el auricular y le digo a Alberto Durero:
La dulce vida y yo no tenemos parecido.
Poema de
Legna Rodríguez Iglesias
(La Habana, 1984)
(La Habana, 1984)